“No hay ningún territorio que nos haya entregado tantas adhesiones al compromiso ‘Starlight’ como Guadalajara”
Antonia Varela, nacida en Santa Cruz de Tenerife, es doctora en Astrofísica, investigadora del Instituto de Astrofísica de Canarias y directora de la Fundación Starlight. Su especialidad es Caracterización de Observatorios, con lo que lleva más de 30 años en el denominado Grupo de Cielos que trabaja en los parámetros que hay que exigir para decidir cuáles son de calidad y cuáles no.
Ella ha recibido ya datos preliminares de los territorios que abarcan los 161 municipios que han solicitado la adhesión a los compromisos fijados por la fundación en la Sierra Norte y la comarca de Molina y asegura que son “magníficos”.
¿Qué supone para ustedes la Declaración de la Palma?
La Declaración de la Palma de 2007 marca todos nuestros hitos y razón de ser: Protección del cielo y difusión de la Astronomía. Emana de una iniciativa del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), tras una reunión de instituciones y representantes de altísimo nivel que la redactaron y firmaron. Nosotros somos una Fundación sin ánimo de lucro cuyo objetivo es llevar a cabo ese decálogo. Starlight, en su conjunto, es una acción integrada de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y está apoyada por la Unión Astronómica Internacional (IAU) y por la Organización Mundial de Turismo (UNWTO), emergida desde el IAC
¿Cómo deciden que un sitio es merecedor del sello?
El requisito no es sólo la oscuridad del cielo. A mí me gusta más hablar de “luz de estrellas”, es decir, Starlight. Son cielos estrellados y muy negros, es decir, no hay difusión de luz artificial hacia el cielo. Tenemos en cuenta además la nitidez, la transparencia atmosférica, la del aire, tenemos en cuenta más variables genéticas del lugar. Entonces se crearon los conceptos de Reserva y Destino Turístico Starlight. El concepto de Reserva nació en la sede de UNESCO en París, en el año 2007 y fue porque en el décimo artículo de la Declaración Starlight se estableció para que todas las reservas de biosfera, parques nacionales, parques naturales, lugares Patrimonio, es decir, todas las reservas de naturaleza y biodiversidad deberían implementar la protección del cielo y ser Reservas Starlight. Eso marca un antes y un después en el concepto que trabajamos: no contaminar el cielo, no solo ahorrar energía.
¿Qué proceso hay que seguir para que un término municipal pueda lograr el sello Starlight?
Hay dos conceptos, Reserva y Destino Turístico Starlight. El concepto de reserva aborda un espacio natural que mantiene intactas las condiciones del cielo, donde la calidad llega a unos valores equivalentes a un observatorio científico. Un ejemplo, en la Sierra Norte de Guadalajara podríamos encontrar puntos en los que se podría poner un observatorio científico por algunas de las condiciones que tiene, pero habría que añadir otras más. En primer lugar necesitamos, algo que es muy encomiable y ya se ha hecho en Guadalajara, es que esos 161 municipios se hayan adherido a la Declaración Starlight. No tenemos ningún espacio con tantos municipios. Ya nos han dado preliminares y las medidas son magníficas y cumplen, a priori, las condiciones para ser Destino Turístico Starlight, ya veremos si también de reserva. Espero valores de 22 magnitudes por segundo de arco al cuadrado, lo que supone que muchos territorios de Sierra Norte y comarca de Molina, según me han comunicado, lograrían directamente calificaciones de Reserva, aunque 21 magnitudes, que determina la calificación como Destino, es igualmente altísimo. Cuanto la medida es menor, peor es la calidad. Hay una cosa buena, sobre todo del brillo del cielo. La mejora de la calidad del aire ha ido entre otros factores asociada a la pandemia, ya que no ha habido un compromiso en bajar la iluminación, pese a que estábamos encerrados. Y hago un inciso, nosotros siempre delimitamos nuestros estudios por zonas, y no por municipios, lo que unifica y motiva la cohesión zonal de cara a lograr el máximo resultado. Asimismo hay que hacer una memoria explicativa de los recursos medioambientales, culturales, biodiversidad, científicos, paisajísticos... Todo lo referente al territorio y sus valores.
Aparte de eso se rellena un formulario y al final del formulario hay que aportar el informe pertinente. Una vez que recibamos el formulario, las adhesiones, y la memoria, en caso de reserva, en el caso de destino no hace falta, porque va todo en el formulario, entonces la Fundación manda un auditor astronómico y un auditor astroturístico. Una vez realizada la auditoría presencial, tienen un mes para elevarnos un informe y con el mismo establecen las pautas finales, si hay que subsanar algunas condiciones, para lo que datos plazo de dos meses o en un año, si aprueban con Matrícula de Honor o suspenden y las recomendaciones a realizar.
Luego llevamos a cabo una auditoría para ver las sensibilidades que hay en el territorio, el compromiso existente, experimentar in situ lo que transmite el formulario y establecer reuniones con las autoridades, asociaciones de desarrollo rural, astrónomos aficionados, empresarios, es decir, son muy intensas. Pero lo bueno es que de ahí se saca mucha información.
Otro asunto importante es el seguimiento...
Estas designaciones se revisan y luego se renuevan o no. Eso nos ayuda mucho a tomar medidas preventivas y a mí me quita el sueño, porque poner un preaviso es bastante delicado.
¿En qué medida invitan a los municipios a crear la normativa idónea?
Les asesoramos para elaborar ordenanzas municipales para que tengan sus pautas como sitio Starlight. Además hacemos formación en Astroturismo, única en el mundo. Es muy reconocida y apreciada por mucha gente joven, y no tan joven, que quiere introducirse en este campo.
Cuando se habla de que la calidad del cielo de Guadalajara se puede llegar a comparar con el de un desierto, ¿Es una exageración?
Si hablamos respecto a oscuridad tengo que verlo. Es un lugar donde la contaminación es cero. Si no llega a esos parámetros, aún así pueden ser muy buenas. Si son reservas es que son excepcionales, pero tengo que ver los números. Yo sinceramente he visto valores espectaculares en la zona de Argentina o Pakistán, son cielos a ese nivel, que no hay población. Yo no me atrevería a hacer esa comparativa, porque siempre hay algún fondo de alguna población.
Su labor también se proyecta en el ámbito mundial.
Estamos trabajando en primera línea para intentar potenciar designaciones también a nivel internacional. De hecho la Fundación colabora con el I Congreso Científico Dark and Quiet Skies que se va a celebrar en La Palma, tras un workshop que se llevó a cabo on line, y fue a petición de Naciones Unidas, con el objetivo de crear una serie de recomendaciones mundiales comunes para cielos oscuros y tranquilos llevadas a cabo por expertos de todo el mundo.
Es verdad que el alumbrado depende mucho del ámbito municipal, por eso trabajamos con los municipios para que haya unas ordenanzas que incluso pueden ser más estrictas que las que marcan las propias comunidades.
¿Ve a Guadalajara de cara al eclipse de agosto de 2026 como destino de referencia astroturística?
A priori sí; le puedo decir que, en general, Guadalajara tiene un altísimo potencial para albergar el turismo de estrellas pero un paso muy importante es la certificación de los sitios. A parte de ser un sello amparado por las instituciones que están detrás, tiene un valor importante a la hora de la selectividad. Si quieres hacer astroturismo el visitante va a acudir a los sitios que ya están acreditados para hacer turismo de estrellas, que te garantiza actividades, calidad del cielo, alojamientos tematizados, instrumentación, etc.Pero vamos por el buen camino.
Además tenemos en marcha el campo de la formación de monitores, otro asunto fundamental, con la que ya está planificada en Sigüenza, en la Sierra Norte de Guadalajara.