Calleja, en el Alto Tajo. Te contamos cuándo estará y algún cotilleo más...

10/11/2022 - 16:23 FCV

No se habla de otra cosa en la comarca de Molina de Aragón. Las redes arden y comparten cada una de las informaciones que aparecen al respecto. Y es que en los próximos días podrán ver a Jesús Calleja campando por sus tierras, en el Alto Tajo. Cuatro emitirá la semana que viene el capítulo de Volando Voy que grabó durante la primavera del año pasado.

Será el próximo martes 15 de noviembre, cuando a partir de las 22:45 horas en Cuatro, Jesús Calleja recorra este territorio de gran valor ecológico. Durante el rodaje recorrió el área de Olmeda de Cobeta-Zaorejas, donde tuvo, como es preceptivo en sus programas, la reunión popular con sus vecinos. 'Volando Voy', fue grabado la pasada primavera.

El mediático presentador grabó durante mayo del pasado mes de mayo en la provincia de Guadalajara el capítulo que veremos la semana que viene. Y su visita fue motivo de muchos cotilleos sobre su estancia en la zona. Su simple presencia fue un evento extraordinario para los lugareños, con quienes disfrutó de agradables charlas compartiendo mesa y disfrutando de su buena gastronomía. Nueva Alcarria ha podido saber en exclusiva que aprovechó su visita para recorrer en bicicleta las zonas de Trillo, Sacedón y el Alto Tajo, junto a Rubén Martínez, gerente de Trillo Aventura y artífice del proyecto Zona Zentro Bike, los parajes más increíbles del Alto Tajo.

 

Además de recorrer todo el Alto Tajo en helicóptero, a vista de pájaro, bajó desde las alturas e intercambió sensaciones con sus habitantes. Los trillanos no olvidarán su visita. Calleja ha comido y cenado en varias ocasiones en Trillo y compartió vivencias con sus lugareños.

Uno de ellos es el propio Rubén Martínez, con quien, tras cada grabación, llevaba a cabo una de sus rutas MTB, recorriendo parajes mágicos y no sin dificultad, como las Tetas de Viana (Trillo): “Jesús Calleja es una persona muy cercana y amigable, muy buen tío; se quedó prendado de sus maravillosas vistas y, como no podía ser para menos, de la dificultad del sendero de bajada”, describe.

“Él iba con un amigo y alucinó con el Puente de Tagüenza, las sendas de Sacedón y La Puerta, en un recorrido que fue muy variado y en el que puso de relevancia una forma extraordinaria a sus 57 años”, recuerda Rubén. “Demostró su destreza en cada una de las rutas que le propuse, rondando con gran habilidad en los terrenos más técnicos”, concluye.