El Colegio Agustiniano lanza el Proyecto Emocionar

La dimensión emocional y psicológica está cobrando cada vez una mayor importancia y necesita de un acompañamiento más profundo. Por ello el Colegio Agustiniano, que se caracteriza por el seguimiento y acompañamiento de los alumnos y de sus familias, ha lanzado el Proyecto Emocionar. 

Es un proyecto dividido en cuatro dimesiones: la psicológica, la física, la espiritual y la académica. A través de estos pilares, desde el centro quieren ayudar a sus alumnos a formarse y a ser unos adultos felices. Va desde 1º de la ESO a 2º de Bachillerato, y el objetivo es acompañar a los estudiantes en la transición de niños a adultos y hacerlo en un entorno en el que tienen mucha información y a veces no saben como gestionarla. 

Para ello, los profesores están recibiendo formaciones y las están poniendo en práctica con sus alumnos, haciéndoles el centro y los protagonistas con diferentes programas que están llevando a cabo. 

Un ejemplo es el programa Alumnos Amigos, con el cual se ayuda a resolver conflictos de todo tipo que puedan surgir en el colegio. También valoran las peticiones que tienen en cuanto a tutorías, y las hacen adaptadas a ellos. Últimamente han pedido hacer una de problemas psicológicos. Desde el colegio apuntan que los alumnos explican que cada vez más  personas van al psicólogo y que se ve como un tabú, y ellos quieren que se hable en un entorno seguro porque están yendo al psicólogo y entienden que hoy en día es normal que por problemas de aprendizaje, ansiedad o lo que sea se esté yendo. Quieren formarse en esos temas y desde el centro van a darles una formación. También invitan a especialistas para que cuenten su experiencia y los ayuden.

El centro también tiene una alianza con Save The Children, una ONG que trabaja por los derechos de la niñez. A través de esta colaboración el Colegio Agustinano trata de hacer espacios más protegidos, ya que, como dice la ONG, no hay entornos 100 % seguros. Han ido a dar charlas y en el centro han creado una herramienta para evaluar como mejoran en entornos protegidos. Evalúan desde lo más físico, como baños o entradas y salidas, hasta la formación que está recibiendo el colegio o las medidas que se están llevando a cabo.

Para lograr un ocio organizado y erradicar al máximo los problemas, han organizado una especie de olimpiadas en los momentos en los que no hay clases, que es donde suele haber más conflicto. Hacen olimpiadas de diferentes deportes y aseguran que es algo que los alumnos valoran y disfrutan mucho.

Con los más mayores, uno de los programas con más éxito es el de Mi Futuro Empieza Hoy. Consiste en hacer un proyecto personal de vida para que vean a donde quieren encauzar su vida y se les ayuda a tomar esa decisión. Una actividad muy valorada es aquella gracias a la cual se sumergen en un trabajo durante un día. Hay muchos que refuerzan su vocación y otros que se dan cuenta de que no es lo suyo. Es algo que han retomado este año tras el Covid-19 y es de lo que más acogida tiene.

Junto a todo lo anterior, realizan mesas redondas con antiguos alumnos, quienes les cuentan su experiencia y les dan consejos, y también enseñan técnicas de estudio para que aprendan a gestionar más cantidad de contenidos. 

Para terminar, aunque no por ello menos importante, desde el Departamento de Orientación del centro orientación entrevistan a todos los alumnos para que sepan que no están solos y que tienen a una persona con la puerta abierta para hablar de temas académicos y personales.