La Diada, un fracaso anunciado


Pues bien, por incomprensible que parezca, lo cierto es que la Diada trata de convertir en una fiesta aquella solemne derrota ante el ejército de Felipe V de Borbón, rey de España…

Como es bien sabido, el día 11 de septiembre se celebra en Cataluña la denominada Diada, la cual fue declarada Fiesta Oficial de aquella comunidad en el año 1980. Cierto que antes de esta fecha era conmemorada por la minoría nacionalista. Ante tal festividad se hace conveniente recordar qué conmemora en realidad la Diada. Y es la Historia de España la que nos explica lo ocurrido.

A la muerte del rey Carlos II, sin dejar heredero, quedó vacante el trono de España. Para ocuparlo se presentaron como aspirantes Felipe de Anjou, nieto de Luis XIV, rey de Francia, y el archiduque Carlos de Habsburgo, hijo del emperador Leopoldo de Austria. Los dos alegaban derechos legítimos, pero ocurrió que Felipe, sin previo aviso, vino a España, se presentó como heredero de la Corona y fue recibido por el pueblo con gran entusiasmo. Indudablemente, el hecho molestó en gran manera al emperador austríaco, quien le declaró la guerra al rey francés. Comienza así la Guerra de Sucesión (no de “Secesión”, como dicen los nacionalistas catalanes) entre Austria y Francia, pero en la que se vio involucrada España. Esta guerra se extendió a lo largo de 12 años y durante ella Inglaterra, que se había aliado con Austria, se apoderó de Gibraltar, plaza que desde entonces todavía posee.

A la Guerra de Sucesión puso fin el Tratado de Utrecht, pero las Cortes catalanas, partidarias del Archiduque Carlos, no aceptaron dicho Tratado, por lo que le declararon la guerra al de Anjou, coronado ya rey de España con el nombre de Felipe V. Como consecuencia de la absurda decisión de las Cortes catalanas, comenzó la desigual contienda entre las tropas reales y Cataluña… El día 11 de septiembre del año 1714 las tropas del rey entraron triunfantes en Barcelona, con lo que se dio por finalizada aquella breve guerra.

Pues bien, por incomprensible que parezca, lo cierto es que la Diada trata de convertir en una fiesta aquella solemne derrota ante el ejército de Felipe V de Borbón, rey de España… Claro que si extraño fue iniciar aquella desigual contienda, en la que no había ninguna posibilidad de éxito, más lo ha sido la planificación y desarrollo de lo ocurrido en Cataluña el día 1 de octubre del año 2017, cuando se celebró un referéndum ilegal y fue proclamada la República… Suele ocurrir que un despropósito trae otros despropósitos. ¿Hasta cuándo? Quizá hasta que todos los catalanes, ya sean independentistas o no independentistas, se pongan de acuerdo y, dentro del marco constitucional, elaboren un proyecto de futuro común… No hay otro camino.

Como recordaremos, el pasado año 2019 se conmemoró la Diada con un número de asistentes que se había reducido a la mitad con respecto a los del año anterior. Resulta evidente que la asistencia a esta festividad está cotizando a la baja. Hay muchas razones que explican este hecho, pero la más importante quizá sea que la Generalitat no está gobernando con acierto, ya que dedica todas sus fuerzas y el dinero público en minar el orden constitucional de España. La mayoría del pueblo catalán ya se ha percatado de que el principal objetivo de la Generalitat es acabar con las leyes comunes del Estado español, al que acusa de querer restringir las libertades civiles de los catalanes… Cada vez son menos los que se creen tales invenciones, por lo que cada vez son menos los que asisten a la Diada.

Además de lo anterior, hay otro hecho que explica el reducido número de asistentes a la última Diada. Se trata de las luchas intestinas entre los partidos nacionalistas, las cuales están decepcionando a las bases. Muchos de los que asistieron el pasado año declararon a los medios de comunicación que acudían para reivindicar la independencia, pero también para protestar contra los políticos nacionalistas por su total incompetencia. La consecuencia de ello es que la mitad de los catalanes se viene mofando de la otra mitad. Recordemos, por ejemplo, que unos bromistas hicieron sonar a todo volumen el himno de España mientras se hacía la tradicional ofrenda floral ante el monumento a Casanova y se cantaba “Els Segadors”.

Y si a todo lo expuesto le añadimos que la actual pandemia representará un serio inconveniente para una concentración masiva de personas, es de suponer que la Diada del año 2020 no sólo tendrá menos éxito que las anteriores ediciones (lo que de por sí ya es bastante decepcionante), sino que será un rotundo fracaso anunciado.