Pablo Casado disfruta de los encantos de la lavanda en Brihuega
El líder de la oposición, Pablo Casado, está pasando un día de asueto y relax en La Alcarria. Y qué mejor lugar para ello que los campos en flor de la lavanda de Brihuega. FOTOS EN EXCLUSIVA DE NUEVA ALCARRIA: RAFAEL MARTÍN SOLANO
El magnífico trabajo que se está desarrollando en Brihuega, toda la comarca y la provincia, para la promoción económica y turística de un producto con altísimos estándares de calidad como es la lavanda, ha contado con el espaldarazo del líder de la oposición, Pablo Casado, que ha pasado un día de asueto y relax en La Alcarria. Y qué mejor lugar para ello que los campos en flor de la lavanda briocense, símbolo de toda la proyección incluso internacional que está teniendo este producto.
Casado se dio cita en La Alameda, justo a la entrada del pueblo, con Paco Núñez, presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha; el recién designado presidente de los Populares en la provincia de Guadalajara, Lucas Castillo; la ex senadora del PP por Guadalajara, en la actualidad vicesecretaria de Castilla-La Mancha y portavoz del Partido Popular en Brihuega, Ana María González, así como el diputado nacional del PP por Guadalajara, José Ignacio Echániz, otros ediles populares de Brihuega, afiliados y simpatizantes.
En el recorrido, que discurrió entre la calle de las Armas y el Coso, a decir verdad, no tuvo demasiado tiempo para olvidarse de su responsabilidad política al frente del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso. Casado, protegido por la generosa sombra de los paraguas morados, color lavanda, que hay desplegados uniendo la umbría de un lado a otro de los edificios, dio un apacible paseo por esta histórica travesía. Saludó a ciclistas, artesanos que venden productos relacionados con la lavanda, pasteleros, panaderos, hosteleros, y numerosos vecinos que se acercaron. Compró unas rosquillas en la panadería, hizo un alto en la tienda de la lavanda, Alcarria Flora, donde presenció una pequeña demostración de destilación de este producto, a cargo de uno de sus socios, Juanjo de Lope, y se trasladó a la que hay de antigüedades, justo al lado.
Luego, a nivel industrial, Casado visitó la destilería briocense Jardín de la Alcarria. La visita fue muy completa y se quedó asombrado cuando Rubén de Lope, también socio de Alcarria Flora, le invitó a experimentar sobre el terreno, subiéndose con él a una cosechadora de última generación, la labor que realizan a diario en el campo.
Cuando regrese a Madrid podrá contar a sus colegas del Congreso, Senado, Partido Popular y amigos, que la jornada fue inolvidable, que merece la pena impulsar las excelencias de la Alcarria: la lavanda, partiendo de Brihuega, recorriendo La Alcarria, hasta Molina o Sierra Norte; la miel, el aceite, los espárragos, cereales o la buena carne, bien maridada con rojos vinos, de esos que dejan huella en el vaso.