Un alcarreño que fue campeón del mundo de cross: Francisco Aritmendi 'la liebre'

En el rincón de esta semana vamos a recordar muy brevemente la historia deportiva del que tal vez haya sido el deportista más importante de Guadalajara: El atleta Francisco Aritmendi Criado, conocido popularmente como “ La Liebre de Cogolludo”.
  Paco nació en la localidad de Málaga del Fresno el 19 de septiembre del año 1938 y poco después se trasladó con su familia a la cercana villa de Cogolludo. Desde muy joven se vio atraído por diversas modalidades deportivas e incluso hizo sus pinitos en el mundo de la tauromaquia. Una tarde, en la localidad de Arbancón, lidió un novillo con el cual obtuvo un rotundo éxito y recaudó más de cien pesetas con el pase del guante, una autentica fortuna en aquellos tiempos.

  Con el paso del tiempo se dio cuenta que su gran afición era el atletismo y en concreto las carreras de fondo. Su debut oficial se produjo en el año 1957, en una carrera en Guadalajara, organizada por el Frente de Juventudes, donde obtuvo un meritorio segundo puesto. Su primer club deportivo fue nada más y nada menos que el Real Madrid en el cual permaneció hasta su traslado a Zaragoza para realizar el servicio militar obligatorio.
  Una vez terminadas sus obligaciones castrenses fichó por otro club de los grandes, el Fútbol Club Barcelona, que a la postre sería en donde obtuvo los triunfos más brillantes de su carrera deportiva. Tras participar dos años en el Cross de las Naciones, el día glorioso de Francisco Aritmendi llegó el 21 de marzo del año 1964, en la carrera disputada en el hipódromo de Leopardstown en Dublín, capital de Irlanda. Se disputaba el Cross de las Naciones. El día amaneció muy lluvioso lo cual endureció muchísimo el recorrido. Tomaron la salida algo más de doscientos cincuenta participantes y desde el inicio Aritmendi tomó la cabeza de un pelotón formado por los corredores ingleses Bati, Nortin y Cook. Posteriormente, a este grupo de cabeza se añadió el gran favorito de la prueba, el belga Rodants, pero dos kilómetros después abandonaba la prueba definitivamente por problemas estomacales, momento en el que la ‘Liebre de Cogolludo’ se quedó encabezando la carrera de forma solitaria. Con un tiempo de cuarenta minutos y treinta y tres segundos, Aritmendi rompía la cinta de la llegada a la meta, ante el júbilo de los miles de espectadores que abarrotaban las gradas. Fue una carrera épica y por primera vez en la historia, un atleta español y de Guadalajara conseguía el Campeonato del Mundo de campo a través.

   De vuelta a España, Paco fue recibido de forma jubilosa, sobre todo en Barcelona y días más tarde el propio Jefe de Estado, Francisco Franco, le recibió en audiencia en el Palacio del Pardo.
A la temprana edad de 28 años Aritmendi abandonaba el deporte profesional y tras permanecer un periodo de tiempo residiendo en la localidad guipuzcoana de Zarautz, decidía regresar a su querida Guadalajara en compañía de su esposa y sus hijos. Comenzó a trabajar en la empresa Vicasa de Azuqueca de Henares y en el año 1979 se le reconoció los méritos deportivos que obtuvo a lo largo de su vida  y se le otorgo un puesto de ordenanza en la Delegación de Deportes en Guadalajara. A partir de ese momento era muy frecuente ver a Francisco Aritmendi correr por las calles de Guadalajara a un ritmo impresionante a pesar de su avanzada edad.
  El Ayuntamiento de Guadalajara quiso reconocer su trayectoria deportiva y puso su nombre a un paseo junto a las pistas de atletismo de la Fuente de la Niña. Sin lugar a dudas un gran campeón del mundo del atletismo: El guadalajareño Francisco Aritmendi.