Un teatro muy recordado en Guadalajara: El Coliseo Luengo

06/10/2019 - 13:22 Eduardo Díaz

Si hubo una revista que levantó mucha polémica en Guadalajara, fue la de Bibiana Fernández Checa, con su particular obra: “ Una noche con Bibi Andersen”. 

En el rincón de esta semana vamos a recordar un lugar en el que se representaron obras de teatro de todo tipo e igualmente se proyectaron las películas de actualidad; nos estamos refiriendo al Teatro- Cine “Coliseo Luengo”. En el año 1947, en la calle Exposición, existía la terraza de verano “ España”, lugar en donde se proyectaban películas en las noches del verano. Era regentada por el inolvidable Protasio Luengo y su hijo Salustiano. Con el paso del tiempo esta terraza desapareció dando  paso a un moderno edificio de viviendas y toda la planta baja fue aprovechada para la construcción de la Sala Luengo y la discoteca “ Sheyla”. El Coliseo Luengo fue diseñado por los prestigiosos arquitectos: Juan Antonio Aguiló y Ángel Valdés Martínez, los cuales dieron su toque particular a la novedosa y amplia  sala. 

La entrada al local era muy espaciosa y a su izquierda se encontraba un lujoso bar de bebidas y otro tipo de aperitivos. Junto a él unos modernos aseos. En la zona de la derecha se exhibían las carátulas de las películas más famosas que se habían proyectado en la sala. Ya en el interior estaba el impresionante local  que albergaba 1.370 butacas, con una ligera inclinación para impedir la falta de visión de los espectadores, que igualmente no eran molestados por ninguna columna.   

Se crearon ocho puestos de trabajos entre los que se encontraba la taquillera, porteros, acomodadores con sus peculiares linternas, camareros y por último los operarios de cabina.

 

El mayor esplendor del teatro llegaba con la celebración de las Ferias y Fiestas de Guadalajara. Por sus escenarios desfilaban las principales compañías de teatro y revistas de actualidad. Inolvidable fue la obra de Teatro de Pedro Civera Alicia en el País de las Maravillas en las que actuaba la actriz Rafaela Aparicio, María Luisa Merlo y el propio Pedro Civera. Tuvo igualmente mucho éxito la compañía de revistas de Juanito Navarro y Antonio Ozores, que derrochaban humor a raudales y eran acompañados por un ballet de mujeres muy atrevidas que hacían las delicias de los espectadores. Era también esperada y bien recibida la compañía del humorista “Quique Camoiras”, con su divertida obra de Don Armando Gresca. Pero si hubo una revista que levantó mucha polémica en Guadalajara, fue la del transformista Bibiana Fernández Checa, con su particular obra: “ Una noche con Bibi Andersen”, la cual levantó ampollas en la sociedad arriacense e incluso la actriz tuvo que salir escoltada ante la previsión de posible incidentes.

Otra de las anécdotas curiosas del Teatro fue cuando se anunció la actuación del cantante asturiano Víctor Manuel, el cual había manifestado públicamente sus ideales políticos. Ante ello el propietario fue amenazado por una organización ultraderechista. Si actuaba el artista la sala sería quemada con bidones de gasolina, finalmente no se produjo dicha actuación por otras causas.

Con la llegada de la democracia y las primeras elecciones generales el escenario del Coliseo Luengo vio pasar por sus escenarios a los políticos mas destacados como Adolfo Suárez, Manuel Fraga y Enrique Tierno Galván, entre otros muchos.

    En el verano del año 1996 el Teatro Coliseo Luengo bajaba definitivamente el telón dejando una huella imborrable en la sociedad de Guadalajara.