Una persona muy recordada en Guadalajara: el doctor don Ricardo Sanz

27/06/2021 - 10:27 Eduardo Díaz

 El mayor ajetreo de la vida laboral de Ricardo Sanz fue en el año 1958, con la llegada a Guadalajara de la pandemia denominada “ Gripe Asiática".

En la ciudad de Guadalajara han existido personas que han dejado una huella imborrable por su servicio a la ciudadanía, una de ellas ha sido el doctor Ricardo Sanz García, que ejerció la profesión de médico de familia durante 40 años en su querida ciudad arriacense.
  Ricardo nació el 12 de febrero de 1910 en la localidad burgalesa de Aranda de Duero. Tras cursar sus primeros estudios en Valladolid, se trasladó a Madrid en donde obtuvo el doctorado en Medicina por la Universidad de San Carlos.
  El estallido de la guerra civil alteró sus aspiraciones médicas. Intervino en la misma como oficial médico en el Tercio de Requetés. Terminada la contienda fue destinado como médico militar a la Academia de Ingenieros en la Fundación Adoratrices de Guadalajara. Allí comenzó con sus visitas médicas domiciliarias a los lomos del caballo “ Palomo”, que le fue cedido por la institución militar.Cuando la Academia de Ingenieros fue trasladada desde Guadalajara a Toledo, Ricardo Sanz se quedó con su familia en Guadalajara y comenzó con su labor de médico de asistencia pública domiciliaria. En esta etapa se ganó el cariño de sus múltiples pacientes por su simpatía, su cariño y su humanidad hacía los enfermos y los más débiles, ya que incluso abonaba el importe de los medicamentos a las familias que no tenían recursos para comprarlos.
  Existe una curiosa anécdota cuando en una fría noche de invierno, un niño de una familia gitana que habitaba muy cerca del parque de la Concordia su puso muy enfermo. Don Ricardo acudió de manera urgente y cuando atendió a la criatura el “Patriarca” de la familia le dijo: “ A partir de este momento usted ya es uno de los nuestros y esta humilde casa ya es también suya”.
   El mayor ajetreo de la vida laboral de Ricardo Sanz fue en el año 1958, con la llegada a Guadalajara de la pandemia denominada “ Gripe Asiática”, realizando diariamente múltiples visitas domiciliarias. Incluso había días en que no le daba tiempo ni a comer. Su última actividad médica fue en el centro de salud de la calle Cervantes en 1982. A los 75 años de edad puso fin a su carrera profesional.
   Otra de las grandes pasiones de Ricardo Sanz era la investigación histórica. Junto al matrimonio formado por Emilio Cuenca y Margarita del Olmo, escribieron el libro: “Guadalajara en el descubrimiento de América”. En el tomo afirmaban que Cristóbal Colón había nacido el 18 de julio del año 1435 en la localidad de Espinosa de Henares, fruto de una relación amorosa entre doña Aldonza de Mendoza y el duque de Treviño. Este proyecto de identificación del nacimiento del descubridor de las Américas es desarrollado en la actualidad por el hijo de Ricardo Sanz, Alfonso Carlos Sanz Núñez, que recientemente ha pronunciado una conferencia en la Universidad de Granada.
  Don Ricardo Sanz falleció en Guadalajara el 10 de agosto del año 2003 y el Ayuntamiento de Guadalajara le realizó un homenaje póstumo, poniendo una calle con su nombre en el barrio de los Manantiales.