Tendrá Leonor, como lo está teniendo hoy su padre, Felipe VI, un gran reto: ganarse a pulso el puesto demostrando la utilidad de una institución alejada por definición de las reglas de elección democrática y hacerlo de forma íntegra y conciliadora.

Estos días de recuerdo a los muertos, de añoranzas y tristeza, nos acercan también a un valor más de nuestra ciudad de Guadalajara.

Después de trabajar 38 años en el cementerio de Guadalajara, Luisito se jubiló en el año 1988 recibiendo el homenaje de sus compañeros y la medalla de plata de la ciudad de Guadalajara de manos de Javier de Irízar. Foto de Raquel Triguero. 

Es significativo el número de llamadas que se producen en la Fundación Animal Rescue para informarse sobre cómo dejar un testamento solidario con los animales que se tienen a cargo, con la conciencia de que ante su fallecimiento la familia lo va a desatender.

 Es tiempo de hacer buena la frase de que “nadie muere mientras es recordado” y de reflexionar sobre cómo vivimos ese fragmento de tiempo del que estamos disponiendo para aprovecharlo mejor.

Israel ocupa territorios que no le corresponden, es cierto, pero también lo es que los ganó en conflictos bélicos que iniciaron sus vecinos.

En esta tribuna en Nueva Alcarria, proponemos que la Alcarria tenga su propia bandera, su escudo y su himno -una jota, interpretada con dulzaina y otros instrumentos que vinculan la partitura con los sonidos de nuestra tierra-, sin quitar nada al resto de símbolos nacionales, autonómicos y locales.

 A nosotros nos gusta hablar del paso del tiempo, al menos con la regularidad  de las Estaciones o meses en que se ha dado en fraccionarlo para mejor entenderlo. El hombre en su finitud necesita fraccionar para mejor entenderse

Don Mariano fue un excelente párroco en Pastrana; con su recuerdo, doy mi más admirado homenaje a los párrocos de toda la diócesis. ¡Gracias, queridos amigos!.

Cifuentes y Peralveche tienen quién les escriba. Víctor Martínez Viana, ‘Vitín’, firma habitual de Nueva Alcarria desde 1990, acaba de publicar Cien Fuentes y Piedras Luches. Historia y vivencias de la villa condal medieval de Cifuentes y de la villa real de Peralveche.

El problema viene porque las entidades locales no piden que se les otorgue estas plazas o lo hacen en menor volumen del que podrían. Por ello hoy se pide la colaboración institucional para aprovechar esta oportunidad.

Dice el capitán que sigamos tocando; total, nadie nos va a escuchar”. Uno de sus colegas apuntaba: “Es igual, nunca lo hacen”. “Venga, música alegre: Baile Nupcial.

Los emprendedores nos enfrentamos a diario a desafíos únicos y toma de decisiones audaces, lo que puede convertir a los emprendedores en modelos a seguir.

Las Misiones tenían varias versiones: biblioteca, gramófono, cine... A Cifuentes le tocó la más difícil de  trasladar e instalar por su naturaleza espectacular, la de museo, que contaba con catorce grabados de Goya, así como copias de cuadros de grandes pintores.

En nuestros pueblos, cada vez más despoblados, todavía pervive la asistencia general, los cálidos apretones de manos, abrazos, besos y pésames de corazón de familiares y amigos.

Los que apuestan por vivir en el pueblo necesitan todo tipo de ayudas para tener las mismas oportunidades y derechos que quienes optan por su vida en las ciudades y aquí juegan un papel imprescindible los Grupos de Desarrollo Rural.

El jueves, 12 de marzo de 1981, la sala de arte de la Caja Provincial de Guadalajara inauguró una muestra escultórica de José de Crefft. El autor de las obras expuestas, y pese a su avanzada edad de 97 años, quiso estar presente en la inauguración. 

Nuestros abuelos no conocían la palaba ‘reciclar’ pero eran unos auténticos maestros del reciclaje, no utilizaban ese verbo, pero tenían otros efectos parecidos.

El churro, no digamos salpicado de azúcar, es la magdalena de Proust pero ahora lo han llevado a las páginas de economía porque está un cuarenta y cuatro por ciento más caro que ayer. La culpa es del aceite, dicen

Nada. Ni en Peñalén, Orea, Peralejos de las Truchas o Poveda de la Sierra (paraíso micológico del Alto Tajo) o en otras sesmas del Señorío hay manera de coger siquiera una almuesta. “Ni están ni se las espera”.